sábado, 5 de marzo de 2011

Carnestolendas. El Carnaval.




Ya tenemos de nuevo aquí, otra vez, el carnaval, la fiesta popular por excelencia. Siempre antecede a la cuaresma y, por ello, desde la Edad Media, se toleraron los excesos que se permitían en estos días, de los que, muchos de ellos no se hubieran tolerado en otra época del año. El carnaval es una fiesta de origen pagano, permitida, por el cristianismo, como válvula de escape ante la rigidez de los tiempos de la cuaresma. Parece ser que tiene su origen en las fiestas romanas a Baco, o quizás en las lupercales. De todas formas, se sabe que en las Kalendae Ianuarie, las fiestas romanas de mayor popularidad, que celebraban el año nuevo en honor de Jano, el desenfreno era muy similar al de las carnestolendas, incluso en la costumbre de disfrazarse y realizar mascaradas y bromas. Una fiesta enorme, que, al parecer, después de la implantación del cristianismo, la cultura popular siguió celebrando y que la iglesia se vio forzada a aceptar.

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